La 71 Asamblea Mundial de la Salud, celebrada en Ginebra la semana pasada, dedicó parte de su programa a la eSalud. Los delegados acordaron pedir a los estados que den prioridad al desarrollo de tecnologías digitales en el ámbito de la salud como catalizador de comunicaciones multidireccionales, bucles de retroalimentación y de la gestión adaptativa basada en datos. Sobre la mesa, la voluntad de crear una estrategia mundial de salud digital.
Madrid, 30 de mayo de 2018. Subrayando la necesidad de velar por el hecho de que las soluciones de salud digital refuercen los modelos actuales de prestación de servicios de salud, mejoren los servicios de salud integrados y centrados en la persona y contribuyan a la equidad sanitaria, así como a corregir la falta de datos científicos sobre las repercusiones de la salud digital en esos ámbitos, dieciséis países han presentado un proyecto de resolución mediante el que solicitan a la Organización Mundial de la Salud (OMS) que elabore una estrategia internacional sobre eSalud.
En un entorno cambiante y disruptivo como el actual, el texto, con fecha de 21 de mayo, reconoce el potencial de las tecnologías digitales para avanzar en el desarrollo sostenible y, en particular, para promover la cobertura sanitaria universal. Al abrigo de la OMS y sin olvidar que la interacción humana sigue siendo un elemento clave para el bienestar de los pacientes, los delegados han solicitado a la organización que apoye la ampliación de estas tecnologías mediante la prestación de ayuda técnica y orientación normativa, el seguimiento de las tendencias y la promoción de las mejores prácticas para mejorar el acceso a los servicios de salud.
Se pide a los Estados Miembros que determinen las esferas en las que se beneficiarían de la asistencia de la OMS, como la aplicación, evaluación y ampliación de los servicios y aplicaciones de salud digital, la seguridad de los datos y las cuestiones éticas y jurídicas. Entre los ejemplos de tecnologías sanitarias digitales existentes se incluyen los sistemas que rastrean los brotes de enfermedades mediante el uso de la externalización masiva o la notificación comunitaria, y los mensajes de texto de telefonía móvil para un cambio de comportamiento positivo con respecto a la prevención y la atención de enfermedades.
Del mismo modo, se anima a considerar cómo las tecnologías digitales podrían integrarse en las infraestructuras y reglamentos actuales de los sistemas de salud de cada país con objeto de respaldar las prioridades sanitarias nacionales y con vistas a reducir la carga que recae sobre los sistemas de salud. En este sentido, se insta a los miembros a que difundan prácticas óptimas y ejemplos acertados de arquitectura, programas y servicios de salud digital, como puedan ser ejemplos de políticas y de aplicación práctica eficaces entre la comunidad internacional y, más en concreto, a través de la OMS y de redes, plataformas digitales y centros bilaterales, regionales, interregionales y mundiales.
Plan de acción
De acuerdo con la resolución, conviene determinar los ámbitos prioritarios en los que habría que disponer de instrucciones normativas y asesoramiento técnico sobre salud digital, en concreto, entre otros: las deficiencias en la investigación, las normas basadas en pruebas, el apoyo a la aplicación y ampliación, los modelos de financiación y de funcionamiento, el contenido, la evaluación, la costoeficacia y sostenibilidad, la seguridad e interoperabilidad de los datos, el marco ético-jurídico, la reutilización y adaptación de las herramientas existentes de salud digital y otros instrumentos pertinentes. Con ello, sale reforzada la resiliencia en materia de salud pública y las oportunidades de mejorar el acceso a datos de calidad y su seguimiento, intercambio y uso, así como la participación directa de los ciudadanos, los profesionales sanitarios y los gobiernos.
La eSalud panamericana
A principios de mes, la Organización Panamericana de la Salud, que auspicia a la Fundación Practicum, lanzó un directorio virtual de perfiles de salud digital que incluye datos y estadísticas de cuarenta y siete estados y territorios del continente americano. Los perfiles engloban la situación de salud de cada país: los indicadores básicos, la expectativa de vida y el gasto total en salud per cápita, entre otros; así como su grado de desarrollo en salud digital recopilado por el Observatorio Global de eSalud de la OMS. Esto incluye las políticas y estrategias nacionales, los marcos legales, la telesalud, el registro médico electrónico, la mSalud (móvil) y el uso del eLearning. Entre otras cosas, la eSalud procura que la aplicación de tecnología al ámbito sanitario optimice el uso del tiempo y los recursos y aumente los insumos para tomar decisiones complejas, por ejemplo, respecto al tratamiento de un paciente.
Ponemos a su disposición un servicio de atención personalizado, a través del cual obtener soporte técnico y ayuda, tanto para la navegación dentro del sitio como para el uso del programa.